Temporada 6. Diagnósticos de pasillo. Episodio 4

“Mi hijo tiene altas capacidades…

pero se aburre porque no lo entienden”

La superdotación como diagnóstico.

Y como excusa.

Y como religión familiar.

Antes, si un niño se aburría en clase, se le decía:

“Aguanta, aprende a esperar, organiza tu mente.”

Ahora, si se aburre:

“Es que es tan listo… que necesita estímulos especiales.”

“No se adapta a la mediocridad del sistema.”

“Se frustra porque piensa más rápido que los demás.”

Traducción libre:

“No me pidas que le corrija el comportamiento. Mi hijo no es desobediente, es brillante.”

“No es indisciplinado… es divergente”

  1. Interrumpe.
  2. Se niega a hacer tareas.
  3. Le cuesta aceptar normas.
  4. Se siente superior al resto.
  5. No tolera el error.
  6. No acepta la crítica.

Todo eso no es mal comportamiento.

Es “pensamiento no lineal”, “hipersensibilidad cognitiva” o “búsqueda de estímulos de mayor nivel”.

Altas Capacidades: versión teatral.

El diagnóstico se convierte en:

  1. Escudo: para no exigirle nada en casa (“¡ya tiene suficiente en el colegio!”).
  2. Identidad familiar: porque “lo ha sacado de mí”.
  3. Excusa para la dejadez:

“¿Que no hace los deberes? Es que no le motivan.”

“¿Que suspende? Es que está por encima del temario.”

“¿Que no escucha? Es que ya sabe lo que le dicen.”

Lo que se olvida

Altas capacidades no significan alta madurez.

No significa autodisciplina.

No significa ser autosuficiente.

Significa que requiere acompañamiento inteligente, firme y constante.

Y, a veces, también significa:

“Mi hijo tiene mucho potencial…

pero en casa no hacemos nada para desarrollarlo.”

Un niño con altas capacidades no se “entrena solo”.

Y si usas su inteligencia como coartada para evitar educarlo, lo estás empujando al fracaso con una medalla al cuello.

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.